La carne de pollo ofrece una gran versatilidad en la cocina. Su suave sabor la hace perfecta para que la coman los niños. Hoy desde Carnicería Sergio y Julio os traemos una sencilla receta de fingers de pollo caseros, ideal para preparar rápidamente en cualquier momento.

Ingredientes para la receta de fingers de pollo caseros

Para preparar fingers de pollo caseros para cuatro personas necesitaréis:

  • 2 pechugas de pollo de Carnicería Sergio y Julio
  • zumo de 1 limón
  • ajo en polvo (o 2 dientes de ajo)
  • perejil (puede ser fresco o seco)
  • orégano
  • aceite de oliva virgen extra
  • pimienta negra recién molida
  • sal
  • huevo
  • pan rallado

Paso a paso de la receta

Esta receta de fingers de pollo caseros no puede ser más fácil de preparar. Además, admite las variantes de aderezo que cada uno prefiera.

El primer paso para preparar los fingers es preparar el aliño para el pollo. Para ello, exprimimos el zumo de un limón y retiramos las pepitas. Lo echamos en un bol o recipiente amplio.

A continuación, añadimos el ajo en polvo, el perejil y el orégano al gusto. También admite un poco de pimentón de la Vera (dulce o picante), un poco de mostaza, finas hierbas, cebolla en polvo, cayena molida… Como comentábamos antes, se puede personalizar 100%. Mezclamos bien los ingredientes y reservamos.

Por otro lado, limpiamos bien las pechugas, retirando la posible grasa exterior existente. Después, las cortamos con cuidado en tiras o bastones no demasiado gruesos. Para ello, lo mejor es hacer filetes gruesos y después, sacar de éstos los bastones.

Una vez que los tengamos listos, los echamos en el bol y removemos bien para que la pechuga se impregne perfectamente. Tapamos bien el bol con papel transparente y dejamos que repose en la nevera durante un par de horas.

Transcurrido el tiempo, sacamos los fingers de pollo con cuidado y los escurrimos sobre papel de cocina. A continuación, salpimentamos y pasamos por huevo batido y pan rallado.

Freímos en abundante aceite de oliva virgen extra a temperatura alta, con la precaución de no echar demasiados fingers de golpe. Es preferible tardar un poco más, pero que se frían de manera uniforme.

Cuando estén dorados, los ponemos sobre papel de cocina para eliminar el posible exceso de grasa y los servimos con nuestras salsas favoritas.

¡Que aproveche!